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Sana tu autoestima para sanar tu relación con la comida (II)

Lección 7

Escucha la entrevista en podcast

Texto de Beatriz Álvarez

Puedes leer la primera parte de este texto en la anterior lección.

Aprender a amarse, ¿cómo amarse más y mejor?

El primer paso y la base para poder amarse es el autoconocimiento. No puedes darte amor si no te conoces.

Este es un trabajo que no tiene fin, cada día te vas conociendo, es un proceso vivo.

Para poder conocerte tienes que mirarte, escucharte, dedicarte tiempo. Sacarte del móvil, del ordenador, de la actividad, de las distracciones, y mirarte. Esto puede dar miedo, no estamos acostumbrados, pero puede ser el mayor acto de amor que hagas por ti misma.

Si no estás acostumbrada a mirar, puede que al principio no sepas cómo hacerlo, ¿hacia dónde mirar?

Puedes preguntarte por lo que te gusta, lo que necesitas, escuchar tus emociones, tus deseos... También puedes observar tus reacciones habituales, tus patrones de comportamiento, los que son buenos para ti, y los que no lo son tanto.

También puedes aprender cómo son tus pensamientos, qué pensamientos aparecen ante determinadas situaciones, y cómo esos pensamientos te llevan a sentirte o a actuar de esta o de aquella manera.

Después de conocerte a ti misma/o, tienes que aceptarte/gustarte.

Si no te gustas en todo lo positivo que tienes, y no te aceptas en tus facetas negativas, no podrás tener seguridad y confianza en ti misma.  

Tienes multitud de cualidades, y es posible que te des cuenta de ellas, pero tal vez todavía no te estás dando el reconocimiento que necesitas. Darte reconocimiento es algo tan simple como recordarte varias veces al día tus cualidades o las cosas que has hecho bien. Decirte lo bien que te ha quedado hoy la cena, cuánto esfuerzo has puesto en ayudar a tu hijo con un problema, o lo valiente que fuiste al tratar un tema difícil con un compañero de trabajo.

Es observar todo lo bueno que hay en ti, con cariño, celebrándolo.

Hazlo todos los días, varias veces, ponte una alarma para recordarlo, si lo necesitas, y háblate de tus habilidades, y tus aciertos, hasta que se convierta en algo automático.

Esto forma parte de amarte. ¿Crees que alguien puede sentirse amado por otra persona, si esta solo le habla en tono neutro, o de manera negativa?

Otro aspecto importante para incrementar la autoestima es reducir la Crítica Interior Patológica.

Todas las personas tenemos autocrítica.

Esto es así porque es un mecanismo psicológico que favorece la supervivencia y el bienestar.

Poseer este mecanismo es algo muy positivo que nos apoya y nos ayuda a seguir nuestros intereses, a conseguir nuestros objetivos.

Se trata de una autocrítica positiva.

La autocrítica, cuando aparece, siempre tiene una intención positiva.

La Crítica Interior Patológica, habla desde el miedo, la manipulación, el juicio.

Su intención sigue siendo positiva, pero su efecto puede llegar a ser devastador.

Algunas formas típicas de expresarse de la Crítica Destructiva son:

  • Acusarte de todo aquello que va mal
  • Compararte con los demás, con sus capacidades y logros
  • Exigirte que hagas las cosas a la perfección
  • Atacarte ante el más mínimo error
  • Fijarse en todos tus fracasos y defectos. No prestar atención a tus logros y cualidades.
  • Ponerte normas muy estrictas acerca de cómo debes hacer las cosas
  • Decirte que solo podrás sentirte bien si eres el mejor
  • Te insulta: te llama vaga, feo, inútil, mala madre...
  • Lee la mente de los demás y te dice que están hartos de ti, que no les interesas, o que se aburren contigo

No son formas , ¿verdad? El efecto sobre las emociones y sobre la autoestima puede llegar a ser brutal.

Lo voy a repetir, porque esto es muy importante: su intención es buena, pero lo que falla son las formas.

Por eso no se trata de acabar con la Crítica Interior, dado que todas las personas necesitan tener autocrítica. Se trata de modificarla. Conservar la intención positiva, cambiando la forma en que se expresa. 

Cómo modificar tu Crítica Interior y convertirla en un Cuidador compasivo.

  1. Conocerla. El estar escondida es su gran fuerza. No podrás actuar sobre ella si no la conoces. El primer paso es sintonizar con ella, escuchar lo que te dice, en qué momentos, qué palabras utiliza.

  2. La autocrítica Destructiva habla de formas como esta:   -- Siempre dices estupideces   -- Mira todo ese desorden, no puedes seguir así, qué desastre   -- Se está aburriendo, no volverá a quedar contigo   -- Nunca acabas nada a tiempo, así no llegarás a ninguna parte   -- Soy imbécil   -- Vaya rollos que le metes, eres el rey de la pedantería  

    No siempre se expresa utilizando frases completas. Puede decir una única palabra, cargada de significado.   -- Vago   -- Inútil   -- Despistado.

    En esa palabra están contenidas las centenares de veces que te dijeron que eras eso, te criticaron y señalaron por eso. El peso emocional de esa única palabra es muy grande. A veces la Autocrítica puede también expresarse con imágenes que aparecen en la mente.

    Reproduce escenas de ocasiones en las que te comportaste de forma torpe, o ridícula. De momentos de fracaso, o dificultad. Los momentos en los que hay que estar más atento es:

    - Cuando cometes un error.

    - Cuando las cosas no salen bien, o como esperas.

    - Cuando te han criticado.

    - Cuando te relacionas con personas que pueden ser desaprobantes.

    - Cuando te sientes abatido o deprimido.

Desarmarla

Una vez que te has familiarizado un poco con tu crítica, puedes dar un paso más. Haberla escuchado e identificado su voz, es ya de por si una gran victoria.

Ahora es momento de descubrir qué pretende la Crítica Interior cada vez que te lanza un ataque.

Algunas de las intenciones principales son:

-- Que hagas las cosas bien: todo el mundo tiene una serie de reglas internas que ayudan a desenvolverse en la vida. Ej: cepillarme los dientes después de comer; tratar a los mayores con respeto; tener la casa ordenada; no pegar a los demás; ser puntual...

Hay cientos de reglas internas.

La autocrítica ayuda a seguir estas reglas.

-- Que te sientas bien: Lo malo de la Autocrítica Destructiva es que te ayuda a sentirte bien, pero es sólo temporal.               

 a) Mediante la comparación con los demás. Te compara con frecuencia con los demás, y casi siempre sales en desventaja, pero de vez en cuando, encuentra que eres superior. Esto produce una sensación de bienestar y valía                

b) Fijando altos estándares perfeccionistas. La Autocrítica Destructiva te fija estándares muy altos, inalcanzables normalmente, pero eso sí, te promete que si los alcanzas te sentirás bien por fin. Muy de vez en cuando todo se alinea en una maravillosa perfección, y entonces te sientes en paz contigo.                

c) Sentirte aceptado por unos padres críticos. Cuando utilizas las afirmaciones críticas que utilizaban tus padres, te sientes próximo a ellos. Paradójicamente, identificándote con su punto de vista te sientes más seguro, aceptado y querido.

 -- Que rindas:  La Crítica Destructiva te espolea y te azuza para ayudarte a alcanzar tus metas. --

Disminuyendo el temor al fracaso: La Crítica Destructiva socava tu confianza hasta el punto de hacerte abandonar tus planes de cambio o de logro. Entonces se siente el alivio de no tener que afrontar el miedo al fracaso.

 -- Disminuyendo el miedo al rechazo: Una forma de controlar el miedo al rechazo es predecirlo constantemente de manera que no nos pille por sorpresa.

La Crítica Destructiva practica mucho la lectura de la mente: " Se aburre. No le gustas. Le desagrada cómo trabajas. Está perdiendo interés.

 "Si anticipas un rechazo no te duele tanto cuando sucede.

Otra forma de afrontar el temor al rechazo es rechazarse antes a uno mismo. El criticarse a uno mismo ayuda a aliviar la ansiedad ante un posible ataque de los demás.

-- Ira:  Sentir ira hacia las personas a las que se quiere puede hacer sentir miedo. Una forma de resolverlo es volver esa ira hacia uno mismo. Es uno el que ha fracasado, el que no ha entendido, cuyos errores han causado del mayor problema. De esta manera, ya no hay que arriesgarse a manifestar enfado con nadie.

-- Culpa: La crítica le ayuda a afrontar la culpa inflingiéndole un castigo.

-- Frustración: Cuando se utiliza la crítica para enojarse con uno mismo, lo que se puede estar intentando en realidad es reducir unos niveles altos de frustración y estimulación negativa. Estos ejemplos no son exhaustivos. Tienen el objeto de hacerte pensar en tu propia Autocrítica, en la forma en que te ayuda y en la forma en que te daña.

Cuando la conozcas y conozcas sus intenciones, podrás trabajar para ir generando una voz interior cuidadora y compasiva, que sustituya a la Crítica, cumpliendo con esas mismas funciones, pero sin dañarte.

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